Acceso exclusivo para clientes:
Información comercial:
Lunes a Viernes de 9h a 13h:
Diseño gráfico corporativo y branding
DESARROLLAR
El branding es un aspecto fundamental para toda empresa, ya que su reputación e imagen están en juego. Así que es un aspecto que debe ser cuidadosamente planificado y ejecutado para alcanzar el éxito, pues son muchos los factores a analizar cuando se trata de la marca.
La identidad corporativa es uno de los elementos más importantes en la construcción de toda marca, de manera que debes asegurarte de contar con expertos en el área. A continuación te mostraremos la importancia de tener una buena identidad corporativa para tu marca y cómo ésta puede ayudarte a alcanzar los objetivos de la empresa.
Primero, debemos entender qué es la identidad corporativa. Ésta, puede ser definida como el ADN de una empresa o entidad, e involucra aspectos como los valores de la marca, filosofía, misión, visión, logotipo, tipografía, papelería, entre otros.
Podríamos decir que es la "personalidad" de la marca, aquello que la diferencia de la competencia, y que va más allá de lo tangible o visual, ya que también abarca aspectos intangibles (historia, promesa básica, relaciones con el cliente, entre otros).
Con frecuencia los términos identidad corporativa, imagen y branding suelen confundirse. Sin embargo, es importante aclarar que cada uno de ellos es distinto, aunque tienen una estrecha relación entre sí. Empecemos explicando la diferencia entre el branding y la identidad corporativa.
La identidad corporativa es tan solo una de las fases en el proceso de branding, el cual incluye aspectos tan complejos como la estrategia, el naming o creación del nombre, posicionamiento, lealtad y arquitectura de marca. De esta manera, esta identidad representa únicamente la punta del iceberg.
¿Y qué hay de la imagen? Sencillo, la identidad de la empresa es creada por la empresa y ésta tiene el control sobre ella, mientras que la imagen es la manera como el público percibe a la marca, su opinión y concepto de la misma, y la empresa tiene poco control sobre esta. La identidad es un factor interno de la organización, mientras que la imagen es externa.
Aunque la identidad empresarial intente expresar un mensaje positivo respecto a la marca, la imagen de la misma puede ser negativa debido a incoherencias entre lo que la empresa dice y lo que hace. Por ello, es muy importante que las acciones de la empresa estén en consonancia con la estrategia de comunicación, de esta manera se generará confianza y respeto, consolidando la imagen de la marca.
Otro término con el que suele confundirse la identidad corporativa es con la identidad visual corporativa, la cual es la representación gráfica de la marca (logotipo, colores, papelería, tipografía, página web...), mientras que la identidad de la marca abarca otros aspectos que van más allá de lo físico, tal como acabamos de mencionar.
Es en la identidad visual corporativa donde se encuentra el diseño gráfico corporativo, mediante el cual se realizará la representación visual de la marca. Esta identidad está conformada por diferentes elementos, tales como:
Elegir el nombre adecuado para una marca es todo un reto, ya que puede influir en gran medida en el éxito o fracaso de la misma, y es aquí donde entra en juego el naming. Al crear el nombre es importante que este represente todo lo que es la empresa o marca y es el primer factor de diferenciación, pues debe ser único.
¿Qué se debe tener en cuenta al crear un buen nombre? Debe ser original, memorable, inconfundible, coherente, fácil de leer y pronunciar, e incluso, debe contar una historia. También tenemos que asegurarnos que este nombre no evoque asociaciones negativas, tanto en nuestro idioma como en otras lenguas.
Podríamos decir que el logotipo es incluso más importante que el nombre, ya que la mente recuerda mejor las imágenes que las palabras, por lo que no basta con que nuestro logo sea el nombre de la marca con una letra "bonita". El logotipo puede acompañar al nombre o sustituirlo y debe ser único, atemporal y representativo.
Para crear un buen logo que sea adecuado para nuestra marca debemos analizar factores como el tipo de negocio, el target y la personalidad de la marca. Esto determinará qué colores usar, cuál es la tipografía adecuada y qué elementos debemos incluir. Hay que recordar que el logotipo es la primera impresión que el cliente tendrá de nuestro negocio, así que debemos concederle importancia.
La tipografía debe ser distintiva, coherente y representativa. De hecho, muchas empresas son reconocidas por este elemento, por lo que es la clave para lograr una identidad visual corporativa efectiva. Tiene que ser fácil de leer y estar acorde con la personalidad de la marca.
Los colores pueden provocar una gran variedad de emociones, tanto positivas como negativas, y el cerebro es capaz de asociar cada color a un tipo de producto en específico. Así que la paleta de colores no es algo que pueda dejarse al azar. Los colores elegidos deben expresar la personalidad de la marca y facilitar la asociación.
Un claro ejemplo de esto es Coca-Cola. Al ver una lata de color rojo inmediatamente podemos asociar este color con la marca, por lo que ni siquiera es necesario observar el logotipo para identificar el producto.
Una imagen vale más que mil palabras, y esto es especialmente cierto cuando se trata de la identidad visual de la marca. Los íconos, fotografías e ilustraciones tienen que ser coherentes con el resto de los elementos y deben ser escogidos de forma muy cuidadosa para evitar malentendidos.
Muchas veces no es tan importante lo que decimos sino cómo lo decimos, y a eso se refiere el tono comunicacional. Es la manera como la empresa expresa su mensaje al target y debe ser coherente con su personalidad y el tipo de público a tratar. Puede ser usado un tono informal y cercano, o uno más técnico y distante... todo dependerá de los factores antes mencionados.
En un mundo cada vez más digitalizado, la página web de la empresa es primordial. De hecho, es considerada la segunda experiencia de compra más importante, solo superada por la experiencia real. Los consumidores confían más en aquellas empresas que tienen presencia online, y es que este se ha convertido en uno de los medios más importantes en nuestros días.
Debemos asegurarnos que la página web de la empresa sea fácil de usar, cuente con un diseño atractivo y represente con exactitud a la marca. Las redes sociales y los blogs también son otros medios digitales que pueden ser de gran ayuda para nuestro negocio, ya que permiten lograr el engagement con el público objetivo, así como detectar problemas y dificultades antes de que sea demasiado tarde.
En definitiva, la reputación online juega un papel fundamental en la identidad corporativa de la empresa, por lo que es necesario prestar atención al respecto.
Las tarjetas de presentación, los flyers, catálogos, invitaciones, etc. también forman parte de la identidad visual corporativa. La papelería representa una oportunidad para plasmar la personalidad de la marca y, debido a que es un medio utilizado para comunicarnos con los clientes, debemos ser cuidadosos en este aspecto y vigilar cada detalle.
El embalaje de un producto debe ser único, lo suficiente como para diferenciarse claramente de la competencia. Los colores, las imágenes, las formas y los mensajes del packaging pueden hacer que un consumidor se lleve a casa nuestro producto o que lo rechace.
La persuasión es la clave y destacar es fundamental en las estanterías, uno de los entornos de marketing más competitivos.
Uno de los principales beneficios de una buena identidad corporativa es la diferenciación que nos otorga. Esto es especialmente importante hoy en día debido a que cada vez es más difícil para los consumidores diferenciar entre millones de marcas y productos existentes. Por eso, en un mercado donde la competencia se incrementa constantemente, resaltar del resto es la única manera de alcanzar el éxito.
El consumidor moderno ya no compra productos, sino marcas y el conjunto de experiencias que estas ofrecen. Debemos lograr que nuestro target se sienta identificado con los valores, la filosofía y la cultura de la empresa, y esto lo podemos lograr mediante el desarrollo de una adecuada identidad de marca.
Una identidad clara y perdurable aumenta el valor de la marca y le ofrece a los consumidores un mayor nivel de confianza hacia la marca. Asimismo, ayuda a mejorar la reputación de la empresa y permite lograr el posicionamiento en la mente del consumidor de forma más fácil y rápida.
También permite unificar y dotar de coherencia a cada uno de los mensajes y estrategias comunicativas. Una buena identidad corporativa es un aspecto vital para toda empresa, por lo que no se puede dejar al azar ningún elemento de la misma.
Una vez que ya hemos aclarado todo lo que implica la identidad corporativa y el branding, podemos empezar a desarrollar una estrategia que conduzca a nuestra empresa al éxito.
Como hemos señalado, debemos cuidar la identidad corporativa de nuestra empresa, por lo que es fundamental asesorarse con profesionales en el área. Somos expertos en todo lo relacionado al diseño de marca y el diseño gráfico corporativo, así que no dudes en contactarnos. Con gusto te ofreceremos la asesoría necesaria para impulsar tu negocio y lograr todos tus objetivos y metas.
Te ofrecemos soluciones para cubrir prácticamente todas las necesidades de tu empresa en el entorno digital. Internet ofrece un sinfín de posibilidades comerciales y de comunicación que en el fondo simplifican acciones y reducen costes. Estamos especializados en diseño web, tiendas online, páginas de aterrizaje, aplicaciones, correo electrónico corporativo y podemos ofrecerte servicios de desarrollo orientados a tus negocio.